Las energías renovables son aquellas fuentes de energía basadas en la utilización de recursos naturales como el sol, el viento, el agua o la biomasa vegetal o animal. Se caracterizan por no utilizar combustibles fósiles, sino recursos naturales capaces de renovarse ilimitadamente.
 
Uno de sus puntos fuertes es que tienen un impacto ambiental muy escaso, ya que, además de no utilizar recursos finitos, no generan contaminantes.
Gracias al uso de las energías renovables, éstas ayudan a que las casas sean mucho más autosuficientes en su consumo eléctrico.